Mantis religiosa

Mantis religiosa (mantis religiosa)

 

La mantis es el mayor de los cazadores en el mundo de los insectos. La longitud de su cuerpo es de 45-75mm. Suelen ser de color verde parduzco, a veces incluso amarillas. El protórax es largo, las patas delanteras se han convertido en tenazas para apresar a sus víctimas, y funcionan como una navaja de muelle provista de púas. Tiene dos grandes ojos compuestos por tres ojos sencillos. La cabeza puede girar hasta 180º y tiene dos largas y finas antenas.

Distribución:
Se encuentra en toda España. Solo habita lugares especialmente cálidos y de clima faborable para su supervivencia. Se puede encontrar entre las piedras o en la hierba,  casi siempre inmóviles esperando a que pase una presa.

Alimentación:

Las mantis religiosas se alimentan de muchas presas diferentes. Desde polillas y moscas hasta saltamontes, pasando por una gran variedad de insectos de todo tipo.



Curiosidades:

En algunas especies solo los machos pueden volar.
Las hembras después de aparearse durante horas devoran al macho y al cabo de algunos días ponen los huevos envueltos en una secreción espumosa que al poco tiempo se endurece. Las mantis religiosas son muy beneficiosas para los cultivos ya que se comen grandes cantidades de insectos perjudiciales.

 





Fotografías tomadas en la Sierra de Gata